sábado, 25 de noviembre de 2017

Cántico

Miércoles 21 hs en Teatro Hasta Trilce ( Maza 177 )





Dirección Coreográfica y Puesta en Escena de Alejandro Cervera y Dirección Musical de Andrés Gerszenzon.

La temporada lírica programada por Hasta Trilce para el 2017, llega a su fin, con Cántico, bellísima puesta de El Cantar de los Cantares, según muchos, el más hermoso de los poemas del Rey Salomón.

Un espectáculo muy logrado, con una belleza visual y sonora exquisita, puesta dotada de un despliegue escénico que debemos destacar ya que no es usual verlo en el teatro independiente y habla del enorme esfuerzo realizado, para lograr un espectáculo de tanta calidad artística.






Cuando hablamos de gran despliegue, no exageramos en nada, hay una orquesta dirigida magistralmente por Andrés Garszenzon, compuesta nada menos que por ocho cantantes y cinco músicos y no contamos a los actores.

Un placer poder disfrutar de las voces de las soprano Marìa Paula Alberdi y Bárbara Perrotta, la fuerza de los tenores Facundo Echevarría y Nicolás Tindiglia, la distinción de Eleonora Kifer en alto y los barítonos Fernando Borrás y Lautaro Nolli.
Todos jóvenes muy talentosos, con voces privilegiadas, que su lucen en lo individual y brillan en el conjunto.

La armonía entre las voces y los instrumentos musicales es total, Milena Eibuszyc virtuosa con el violoncello, Marcelo Dutto en órgano, Helene Dauphin en clave y Anderson de Lima con el laúd, maravilloso instrumento de cuerda, cuyo origen se remonta a la Edad Media, se unen, para marcar los bellos sones de la noche.





Ya tenemos voces y música, el triángulo virtuoso, se completa en el escenario, con ese grupo de actores, que con sus cuerpos, sus danzas y sus coreografías transmiten un sinfín de sensaciones, con sensualidad, erotismo y sobre todo con mucha poesía.

Vamos a nombrarlos a todos, ya que su entrega absoluta merece un reconocimiento, nos referimos a Paz Corinaldesi, Sergio Villalba, Verónica García, Joaquín Tolosa, Gerardo Marturano, Eugenia Stanovnik, José Carlos Campitelli y Alicia Muxo, una excelente actriz, a la que vimos este año lucirse en La Joya màs Preciada, como la Reina de Inglaterra.





Es un goce para los oídos, disfrutar de las melodías de Dunstable, Palestrina, Monteverdi, Schultz, Victoria y Corelli, que desfilan a lo largo de la noche y proporcionan una atmósfera ideal, para que esos cuerpos danzantes se expresen.

Sin ser especialistas en el género lírico, podemos afirmar que estamos en presencia de un espectáculo de enorme sensibilidad artística, donde la música y la poesía fluyen de manera continúa.

Hay un trabajo fundamental de Alejandro Cervera y Andrés Gerszenzon, para cohesionar los diferentes componentes de la obra, logrando que instrumentos, voces y cuerpos en movimiento, se conjuguen, para ofrecer una propuesta refinada, que merece reconocimiento.





En definitiva, un cierre de oro, para la temporada lírica propuesta Hasta Trilce, que ojalá tenga continuidad en el 2018, una invitación para ser parte de un viaje, donde la sensibilidad y el vuelo poético dicen presente.

Solo queda, felicitar a todos los componente de Cántico, por la puesta tan bella que ofrecen, donde el amor se expresa, con un lenguaje especial.

Cántico, resulta una propuesta exquisita y muy saludable, que pone al alcance de todo el público, un espectáculo de gran nivel y la chance de acercar cada vez más espectadores a un género tan rico, como el lírico, que tanto deleita a nuestros sentidos.



Pensador Teatral



Frágil

Jueves a Sábados 21 30 hs en Teatro Maipo ( Esmeralda 443 )






Idea y Guión de Sebastián Wainraich. Dirección de Flor D`Agostino.

Llegó el nuevo unipersonal de Sebastián Wainraich, luego del gran éxito que tuvo con Wainraich y Los Frustrados, que estuvo cinco años en cartel, presenta Frágil, su segunda obra, volviendo a elegir como teatro al mítico Maipo.

De entrada decir, que siempre es complicado desprenderse de una obra exitosa, mérito de Sebastián animarse a dar el paso y podemos afirmar sin temor a equivocarnos, que Frágíl supera a su predecesora, ya que a su humor y estilo tan particular, le suma una puesta muy importante, de la mano de Flor D`Agostino en la dirección.





Wainraich a esta altura ya se convirtió en un referente dentro del humor nacional, talentoso y multifacético, lleva más de 10 años, liderando las mediciones de radio, con Metro y Medio, su entrañable programa de radio, donde una legión de seguidores, sobre todo jóvenes, lo escuchan todas las tardes / noches.

Uno de los precursores del stand up en nuestro país, redobla nuevamente la apuesta con Frágil, mostrándose muy cómodo, en este inmenso escenario del Maipo y con una convocatoria increíble, ya que no es sencillo colmar una sala de estas dimensiones con un unipersonal y Wanraich vuelve a conseguirlo. Lo logra ampliando ese público fiel de la radio, ya que vemos gente de todas las edades y para quien no lo vió nunca en teatro, se van a sorprender, porque lo notarán por momentos con un lenguaje más subido de tono, imposible para la radio y muy adecuado aquí.

Y para nosotros, cuál es el secreto de este éxito que sorprende a mucha gente ??? Son varias las razones, la principal, el histrionismo y el talento de Sebastián, con su estilo de antihéroe, logra empatizar con elpúblico, que siente que las cosas que le suceden al protagonista, son las que le suceden a ellos, ya que nos habla de las verdades de las vida, que a todos nos tocan.





Otra razón de peso, es su poder de fuego para la comedia, que aquí vuelve a ratificar en toda su dimensión, Wainraich hace reír y mucho a los espectadores, lo consigue en forma pareja a lo largo de la obra y esto es algo muy difícil de lograr. Se lo nota muy cómodo, dominando la situación y los tiempos. ( sin dudas incorporó a su bagaje actoral, algunas cositas del enorme Fernando Peña, con quién trabajo varios años )

La tercera razón, son los textos inteligentes que presenta, escritos por el mismo, sin dudas sabe que temas tocar y logra un muy buen maridaje entra humor y drama, que hacen que sus espectáculos,  planteados desde la comedia, lograr llevar al espectador a escenarios profundos y a la reflexión.
Son temas cotidianos que a todos nos atraviesan y siembra preguntas políticamente incorrectas, que todos nos hacemos internamente, pero dificilmente exteriorizamos.

En este caso con Frágil, nos hablará sobre la postura que debemos adoptar ante la vida, como debemos actuar,ante la situaciones que se nos presentan, si debemos preocuparnos por todo o abordar algunas cuestiones de manera más liviana.






La obra nos habla del paso de los años, de la vida, de las pérdidas, del matrimonio, de lo difícil que es cumplir la monogamía, la llegada de los hijos y más que nada de nuestra actitud ante la vida. Hay un momento especialmente desopilante para hablar de la genética Wanraich versus la genética Repetto. Las sorpresas abundan. Como dijimos el texto es rico y seduce.

Wainraich está solo en escena, pero dando gala de una sorprendente versatilidad, irá creando diferentes personajes, sin abandonar nunca el escenario, ni ocultándose del público. Las transformaciones y las composiciones de los personajes, se harán de cara al espectador, que sorprendido irá viendo como aparece alguna peluca, algún vestido, un sombrero o lo que el personaje que está naciendo requiere. La decisión de no salir nunca de escena, le aporta una dinámica especial a la trama y logra una complicidad total con el espectador, que participa del nacimiento, el transcurrir y la muerte de cada personaje.





No vamos a adelantar mucho de los personajes, queremos conservar el suspenso, solo mencionar que las composiciones son brillantes y cada uno tendrá su personaje favorito, el nuestro Estela Tomati.

El relato es muy ágil, las risas son una constante y como dijimos antes, el autor tiene la habilidad de poder intercalar en la comedia, preguntas existenciales que todos nos hacemos y vivencias cotidianas, logrando de esta forma una identificación total con el público,

Un gran mérito que tiene Frágil, es no quedarse sólo con el talento de Wainraich en escena, algo que es una tentación y sucede en muchos espectáculos, aquí se lo acompaña, con una puesta de gran nivel, donde una pantalla gigante en el fondo del escenario, proyecta fotos e imágenes a lo largo de la noche y se transforma en un elemento clave, para amenizar y enriquecer los relatos. Hay un destacado diseño de luces de Juan García y un Diseño Sonoro a cargo de Diego Cannizzaro, que es excelente, con una potencia y una nitidez, que jerarquizan mucho el espectáculo.
Es una puesta dinámica y muy atractiva, la que nos propone Flor D`Agostino, que sin dudas encuentra eco en la producción de Lino Patalano y Diego Scott.





En definitiva, estamos en presencia de una excelente comedia que nos presenta la cartelera porteña. Quien escribe estas líneas ve mucho teatro en el año y puede afirmar sin dudas, que Frágil, está entre las obras que más, lo hicieron reír en esta temporada.

Solo queda recomendar mucho la obra, se van a encontrar con un Wainraich, cada vez más afianzado en su rol de comediante, con ese estilo propio, que ya es su sello personal y desenvolviendosé en el escenario con un histrionismo y una soltura que no deja de sorprender.

Si a sus innegables condiciones para hacer reír, le sumamos un libro inteligente, una dirección precisa y una puesta de jerarquía, el resultado sin dudas será muy favorable y por eso no es de extrañar que Frágil, sea un éxito de público, que llena el Maipo en cada función y que al término del espectáculo los espectadores, aplaudan a rabiar, a este antihéroe, con el que tanto se identifican.



Pensador Teatral.



miércoles, 15 de noviembre de 2017

Historias de Locura Ordinaria

Domingos 18 hs en Teatro Margarita Xirgu.






Dramaturgia de Petr Zelenka y Dirección de Julieta Cayetina.

Una propuesta que nos sorprendió muy gratamente la de Historias de Locura Ordinaria, en el debut como directora de la multifacética Julieta Cayetina, a la que muchos conocerán de la radio y la televisión y se pueden sorprender en su aparición como directora, pero no a nosotros, que vimos su gran crecimiento como actriz, en obras como La Fiesta del Viejo, Confesiones de Mujeres de 30 y principalmente en Ser Ellas, donde interpretó a Frida Kahlo.

Cayetina estaba buscando una buena obra para debutar y eligió como autor a Petr Zelenka, dramaturgo checo, considerado el maestro de la comedia en su país, en donde muchos lo comparan con Woody Allen, ya que mediante una mirada humorística e irónica, refleja los comportamientos de las personas.





Realmente la elección de Julieta fue realmente acertada, ya que el texto del autor checo es muy fresco y logra con inteligencia, jugando mucho con el absurdo y siempre anclado en el humor, retratar la manera en que las personas buscan huir de la soledad y del abandono, pudiendo a los métodos más alocados, para conseguir una pareja o lograr retener a la que tienen.

Tomando a Pedro ( Manuel Vignau ) como eje de esta historia, un muchacho que está solo y quiere recuperar a su novia, a lo largo del relato irán apareciendo, sus padres, sus amigos y hasta sus vecinos, compartiendo algunas caraterísticas en común, todos están un poquito locos y de ninguna manera quieren estar solos en la vida.

La trama tiene mucha dinámica, son diez actores en escena, que con Pedro como punto en común, irán entrando y saliendo de escena, con mucho ritmo y trayendo distintos personajes, creando situaciones desopliantes y muy graciosas.





Un clave para el buen suceso que tiene la obra, radica en la riqueza del elenco que se reunió para esta pieza, aquí también eligió bien Cayetina, ya que se rodeó mayormente, de actores jóvenes, talentosos y con mucha experiencia teatral pese a ese juventud. Al verlos en acción notamos que indudablemente se encontraron cómodos con el libro y con la propuesta, encontrando el espacio adecuado, para lucirse mucho.

Nombremos a alguno de los protagonistas, ya que sus trabajas merecen el destaque. Arrancando por Manuel Vignau, que ese Pedro ingenuo y  bastante chiflado. Lidiando con sus padres, que no le van en zaga en su locura, con amigos especiales y obsesionado por volver con su novia. Con mucho aplomo y naturalidad, provoca carcajadas al por mayor en la platea. Gran manejo de los tiempos y mucha gracias, para redondear un gran trabajo.





Sus padres, merecen párrafo aparte, Roberto Romano un actorazo de larga trayectoria, al que vimos brillar este año en La Empresa Siempre Perdona, aquí sorprende con un personaje que por el Alzheimer, está perdiendo su memoria y conserva el recuerdo vivo de cuando trabajaba doblando los noticieros del comunismo ( la obra se desarrolla en los años siguientes a la caída del régimen ). Aquí muestra una veta humorística que sorprende y habla de su versatilidad..
Su esposa es Ana Celentano, compañera de Cayetina en Ser Ellas, una actriz de enorme oficio y aquí con mucho histrionismo, compone a una mujer parlanchina y controladora, que quiere tener bajo control a padre e hijo, misión casi imposible.

Ezequiel Tronconi, es Mosca, el mejor amigo de Pedro, obsesionado por tener compañía femenina y satisfacer sus bajos instintos, recurrirá a originales invenciones, que sin dudas le van a causas muchos dolores de cabeza. Un joven actor del off, que ya es una realidad y siempre lo vemos destacarse.

Sigamos con Milagros Almeida, una talentosa actriz, que nos gusta mucho y a la que vimos lucirse mucho este año en Las Esposas y también cantando en francés ( muy lindo ) en A Puertas Cerradas. Muy versátil, aquí representando a una escultora bastante chiflada y a una sexy vecina con su elegante trajecito azul , que necesita testigos, para tener sexo con su novio. Aportando frescura y belleza, es muy bueno el aporte de Milagros.





Alejandro Curlane, al que conocemos El Escorpión, es el novio de la vecina sexy, con ese vozarrón que domina la escena, Denise Romano, nos regala su belleza y compone a una maniquí, muy divertido, con una vocecita muy graciosa, Santiago Caamaño compone un personaje con algunos tics, muy divertido, Susana Giannone, es la novia ninfómana y de fuerte carácter, con la que Pedro quiere volver y Silvina Damia es la bailarina, que brinda bellos pasos de ballet.

Son diez actores en escena y doce personajes que tiene la pieza, todos hacen su aporte, algunos con más tiempo en escena y otros menos, pero todos dejan correr su veta humorística,  teniendo su momento individual para lucirse, además de actuar muy bien en el conjunto. Como ya dijimos, muy inteligente fue Cayetina en rodearse de un elenco tan rico y talentoso, como el que reunió aquí..

La puesta que propone la novel directora es muy creativa, ya que aprovechó con gran ingenio el espacio de este gran teatro que es el Margarita Xirgu. Decidió quitar butacas y montar el escenario en un semicírculo, con el público dispuesto en forma enfrentada, logrando una estupenda cercanía con los espectadores, logrando una puesta íntima. Pero además de esto, la directora aprovecha en algunas escenas, el gran escenario del Xirgu, las escaleras y hasta los palcos. Ingenio y creatividad, que le agregan valor a la puesta y al espectáculo.
Hay un buen diseño de luces de Soledad Ianni y un rubro que hay que destacar mucho es el vestuario, a cargo de Natalia Señorales, que logra vestir a este grupo numeroso de actores, con elegancia, desparpajo o glamour según pide cada personaje.





En definitiva, una propuesta muy entretenida la que nos trae esta obra checa, la gente se ríe mucho y por las disposición, que tienen las butacas, se logra un efecto multiplicador, al ver las risas y las reacciones del público que tenemos frente a nosotros.

Un excelente y promisorio debut de Cayetina como directora, que se nota mucho para presentar una obra en tan buen nivel, aprovechando las virtudes de esta pieza de Zelenka, que fue traducida a más de diez idiomas y se presentó con suceso en varios países.
Aquí con una puesta fresca, una trama dinámica y un grupo de actores muy talentosos, nos trae una propuesta que nos gustó mucho y que recomendamos.

Fueron pocas las funciones de esta temporada, las localidades agotadas que tuvieron todas sus presentaciones y el prolongado aplauso con que los espectadores despiden al término de la función a los protagonistas, nos dejan dos certezas, la primera saber que Cayetina debutó con el pie derecho como directora y la segunda que Historias de Locuras Ordinarias, merece tener una segunda temporada.


Pensador Teatral.



Sobre Mirjana y los que lo rodean.

Sábados y Domingos 15 30 hs en Teatro Picadero ( Pasaje Santos Discépolo 1857 )






Dramaturgia de Ivor Martinic y Dirección de Guillermo Cacace.

Nuevamente la cartelera porteña nos trae una obra del dramaturgo croata Ivor Martinic, autor que nos resulta conocido, ya que la pieza de su autoría Mi Hijo solo camina un poco más Lento se convirtió en uno de los fenómenos del teatro off, agotando localidades desde hacia tiempo en el inusual horario de las 11 hs y 14 hs.

En el éxito de Mi Hijo camina ... , tuvo mucho que ver Guillermo Cacace, su director que consiguió una puesta ágil y descontracturada, que interpretando el mensaje del autor, logró darle una dinámica propia, dando espacio al numeroso elenco que tiene la obra.





En esta oportunidad, la dupla se vuelva a reeditar, Guillermo es nuevamente el director, de una pieza del croata Martinic. Mirjana ,,,, fue su primer texto, escrito cuando tenía 23 años y como el mismo lo enuncia, fue un relato sincero y valiente, conteniendo las dudas, los errores y los interrogantes que cualquier jóven escritor puede tener. En nuestra opinión, es un libro muy interesante, pero no llega a tener el brillo de Mi Hijo ..., si tenemos que entrar en odiosas comparaciones, porque comparado con esa joyita, cualquier competencia tiene las de perder.

Pero vayamos a Mirjana y los que la rodean, que es la pieza que nos convoca, explorando en el universo femenino cotidiano y sus diversos roles dentro de la sociedad, Veremos a este mujer en su papel de madre, de hija, de empleada, de amante y de esposa. Es muy interesante ver como Mirjana  ( Maria Onetto ) se relaciona con ese mundo hostil, que a diario le pone obstáculos.

La pieza habla de la familia, de los vínculos que tenemos con nuestros seres queridos y de ese mundo íntimo y personal que cada persona tiene. Es muy interesante poder observar a estos seres, como piensan en forma individual y luego como acoplan ese pensamiento a las obligaciones diarias, las afectivas y las laborales, ese delgado equilibrio a la que la vida nos somete a diario.





Entendemos que unos de los mayores méritos de la historia, es lograr un texto real y sincero, con el que el espectador se identifica y se reconoce claramente.

Hay actuaciones muy destacadas, la principal es la de la protagonista, Maria Onetto, dando vida a una Mirjana frágil, que tiene que esforzarse mucho, para poder educar a su hija, soportar los juicios de valor de su madre, las discusiones con su ex marido y las complicaciones del trabajo. Una actriz de enorme talento, que con su estilo calmo y esa paz que transmite verla, aquí nos regala una interpretación deliciosa, plena de sensibilidad.

Pero Onetto no está sola en escena, hay otros siete actores que la acompañan, estando siempre presentes en el escenario, debido al ingenioso dispositivo escénico diseñado por el director.

Una labor muy destacada la de la joven Agustina Groba, como su hija adolescente, que tiene como sueño poder viajar a los Estados Unidos, para desarrollar su carrera como cantante. A propósito hay un momento muy destacado de la obra, en el  que interpreta un tema musical que sorprende gratamente.. Muy bueno lo de Agustina.





También hay que resaltar la tarea de Lide Uranga, gran actriz a la que recordamos de El Loco y la Camisa, aquí interpreta a una madre recta y severa, que llega a casa de Mirjana, para hacerse unos chequeos médicos. 

Vamos a mencionar al resto de elenco, Gabo Correa, Flor Diszel, Mauricio Minetti, Marcela Guery y Fernando Contigiani Garcia, cada uno tiene su momento individual para el lucimiento y para relacionarse con Mirjana, cumpliendo en muy buena forma con sus distintos roles y sumando mucho para la cohesión de la historia.

Hay una escenografía despojada y un original dispositivo, en donde hay pequeños plataformas donde los actores están parados la mayor parte del tiempo y es atractivo observarlos en los momentos en los que no están con la palabra, escuchando y mirando a los que en esos momentos tienen la palabra. Nos gustó el vestuario de Magda Banach y el muy buen diseño lumínico de David Seldes, para una puesta de tono intimista.





En definitiva, estamos en presencia de otra propuesta original y muy interesante made in Croacia, con un director bien nuestro, que sabe sacar lo mejor de este grupo talentoso de actores, en el que María Onetto, brilla en un protagónico que no es sencillo y que la obliga a recurrir a sus enormes recursos escénicos.

Mirjana y los que la rodean, nos habla de la vida rutinaria de una mujer, que está sola y luchando contra todos, principalmente contra ese mundo poco amigable, que se les presenta a las mujeres, que sin tregua todos los días deben enfrentar la vida y mostrarse fuertes, cuando la realidad es otra.

Una obra para reflexionar, que nos recuerda que muchas veces vivir, consiste en resolver los diferentes pruebas que día a día debemos sortear, en búsqueda de una felicidad, que muchas veces parece una meta lejana y utópica.



Pensador Teatral.

martes, 14 de noviembre de 2017

Cronología de las Bestias

Viernes 21 30 hs en Teatro Timbre 4 ( Boedo 640 )





Dramaturgia y DIrección de Lautaro Perotti.

Una obra fuerte y potente la que nos presenta Lautaro. Una pieza donde el suspenso, las situaciones violentas y la tensión acompañarán al espectador desde el primer instante.

Este año disfrutamos mucho viendo a Lautaro Perotti, descollando con actuaciones superlativas en Próximo y Tebas Land, que fueron sin dudas, de las mejores obras que nos ofreció el teatro independiente en el 2017.

Y teníamos ganas de verlo con autor y director, en esta pieza que mucha gente nos había recomendado y ya podemos decirlo, estamos contentos de haber seguido las recomendaciones ya que la propuesta ofrecida es realmente muy valiosa.




El mismo autor, revela que con Cronología de las Bestias, quiso indagar en el compromiso que mucha gente asume con la mentira. Es decir, como en muchas ocasiones las personas en vez de querer ir en búsqueda de la verdad, prefieren aferrarse a situaciones que saben son falsas y todos sus comportamientos irán en dirección de sostener esa mentira, a sabiendas que la verdad será seriamente afectada-

Lautaro para esta obra se inspiró un caso policial ocurrido en los Estados Unidos, donde una persona retornó a su hogar después de diez años de ausencia, cuando su familia lo creía muerto y si instaló en la casa, sin cuestionarse, ni ser cuestionado. Al cabo de un tiempo, tras los resultados del ADN se descrubrió que era un farsante y no era la persona buscada.

Esa noticia fue la disparadora del proceso creativo, adicionalmente en su cabeza siempre rondó el interrogante sobre situaciones donde el compromiso con la mentira llega a su clímax, como en los casos de los nietos desaparecidos, donde los padres adoptivos pueden convivir con sus hijos, sabiendo con certezas y secretamente que no son padres naturales y en algunas situaciones, sabiendo quienes fueron los asesinos de los padres biológicos, situaciones en las obviamente nunca querrán indagar.




Ya por lo indicado, pueden intuir en presencia de una obra profunda y compleja, que no tiene una construcción lineal, hay idas y vueltas en el el tiempo, algunos flashbacks, por eso, en este caso,  conocer las motivaciones que llevaron al autor escribir la historia, es una muy buena ayuda para comprender mejor y tener mejores recursos, para ir armando ese rompecabezas, con las piezas y pistas que en forma magistral,  la obra va ofreciendo a los espectadores, a medida que la trama se va desarrollando.

La historia que nos cuenta Cronología de las Bestias, se centra en la historia de una familia destrozada por la misteriosa desaparición de un hijo que tenía 14 años. La familia lo buscó en forma desesperada, sin tener noticia alguna,  y 13 años después cuando ya nadie tenía esperanzas de hallarlo con vida, Beltrán ( Andrés Ciavaglia ), ese hijo que había faltado por tantos años, retornaba a su casa en forma misteriosa.

El inicio de la obra, es con ese un muchacho de mirada asustada, sucio y con sus ropas rotas, que es descubierto en la casa, escondido tras un sillón,  con un revolver en la mano.

Lo descubre con estupor,  la Tìa Celia ( Adriana Ferrer ), quien llama de inmediato a su hermana, Olinda ( Silvina Sabater ),  que es la madre de Beltrán. ( misteriosamente no hay un nombre de pila del muchacho, solo ese apellido )





Al rato llegará el primo César ( Julian Krakov ), algunos años mayor que Beltran y compañeros de juegos cuando eran chicos.
Completarán la escena el cura del pueblo ( Juan Manuel Casavelos ) que llega a la casa, para tratar de aportar tranquilidad, ya que mucha gente del pueblo se llegó a la puerta de la casa, enterados de la inimaginable aparición del niño desaparecido, que ahora era ya un hombre.

Cuando dijimos que la obra era de suspenso, no exageramos en nada, la trama nos irá acercado pistas a medida que avanza el desarrollo de la obra, para que nosotros vayamos armando el rompecabezas de esta dramaturgia precisa y tan bien construida que presenta la obra.

Al estar en presencia de un thriller de mucho suspenso, no queremos revelar lo que el espectador irá descubriendo, solo adelantar que veremos una familia muy particular, que tiene varios secretos guardados bajo siete llaves y donde cada personaje parece esconder hechos siniestros de su pasado. Y por más que quieran mostrarse como una familia normal, queda claro que no lo son.
Hasta ahí llegamos con lo que contamos, ya que la pieza tiene muchas sorpresas preparadas y el género de suspenso que presenta la obra, nos disuade de seguir revelando datos.

Además de la dramaturgia que ya hemos elogiado reiteradamente, el texto logra llegar al espectador con crudeza y y un vértigo que debemos resaltar, gracias a las excelentes actuaciones que presenta la obra, con un elenco que se nota absolutamente compenetrado con la historia.





La actuación más destacada en nuestra opinión, es la de Andrés Ciavaglia, como Beltrán, el hijo perdido que vuelve con un aura enigmática que impresiona. Su mirada asustada, sus posturas corporales que denotan miedo y tensión, lo asemejan a un animal acorralado, Muy bien llevado, ese silencio y ese andar retraído, que arrastra en toda la trama. Una interpretación magnífica la de Andrés, que compone su personaje en forma magistral.

Es también de excelencia las interpretaciones, que ofrecen las hermanas Adriana Ferrer como Celia y Silvina Sabater como Olinda. Tienen un relación muy particular entre ellas, sobre una superficie de presunta normalidad, se nota que tienen muchas cuentas pendientes entre ellas y el rencor es la ley que rige su fraternal relación. Ambas tienen una veta bestial escondida en su personalidad, Celia es más verborrágica y Olinda más reservada, pero las dos demuestran fuerte carácter y desequilibrios emocionales muy evidentes. Gran labor de estas dos actrices con tanto recorrido en el teatro off, dando vuelo a personajes que no son sencillos, ya que esconden mucho más de lo que muestran.

En la misma sintonía está, Julián Krakov, como el primo Julián, otro personaje enigmático, se nota con facilidad su carga de violencia, tanto verbal, como física, siempre dispuesta a aparecer. Tiene una relación muy particular con su tía Olinda, que provoca mucha tensión en la casa.

Y por último mencionar a Juan Manuel Casavelos, como el cura del pueblo, es el personaje ajeno a la familia, busca ingresar en la intimidad de la misma, para tratar de descubrir algunos de sus secretos, pero sin que les digamos nada, ya pueden imaginar que suerte correrá en ese intento.




Como vemos son cinco actores, que se unen para darle forma a la historia y a esa atmósfera de tensión, suspenso y violencia, que requiere el texto, algo que se logra gracias a su pericia.

La puesta tiene muchos puntos a resaltar, en primer lugar el aprovechamiento integral que se hace de esta mítica sala del Timbre 4, donde los personajes desarrollan escenas paralelas, hablando en el patio, encerrados en el baño o escaleras arriba. Hay un muy buen diseño escenográfico de Eduardo Perez Winter, simulando la casa de familia,  del que destacamos ese sillón, ubicado de espaladas al público, donde los protagonistas se sientan metafóricamente dando la espalada a la verdad.

En definitiva, estamos antes una original y jugada  propuesta, un trhiller donde el suspenso y la tensión, arrancan en la primera escena y se mantendrán hasta el final. El espectador asiste con una mezcla de fascinación e incomodidad, al desfile de hechos que ofrecen estos personajes misteriosos y oscuros, que harán los posible para que la acción transcurra, pero sin perder de vista  una premisa, la verdad siempre se debe mantener oculta.

Nos gustó mucho Cronología de las Bestias, confluyen, una dramaturgia inteligente, actuaciones superlativas y tensión permanente. Recomendamos que vea la obra con los ojos muy abiertos, para tratar de descubrir que siniestros secretos se esconden en el seno de esta familia bestial, que de normal, solo tiene la apariencia.



Pensador Teatral.



domingo, 12 de noviembre de 2017

Amanda y Eduardo

Miércoles 21 hs en El Tinglado Teatro ( Mario Bravo 948 )





Dramaturgia de Armando Discepolo y Dirección de Marcelo Zitelli.

Amanda y Eduardo es una de las obras menos conocidas de Armando Discépolo, reconocido dramaturgo, creador del grotesco criollo y autor de obras clásicas de nuestro teatro como Stefano, Babilonia y El Organito, por citar solo algunas de ellas.
Familia de artistas, no confundir a Armando, el mayor de los Discépolo, con su hermano Enrique, más conocido como Discepolín, poeta y compositor de tangos, con temas que hicieron historia como Cambalache y Cafetín de Buenos Aires.

Pero vayamos a la obra que nos convoca, escrita en 1931, mantiene una vigencia que por momentos asombra. La obra nos habla de amor y del dinero, de como la pasión y el deseo pueden quedar postergados ante un interés económico, poniendo el foco en esta realidad, desde la mirada femenina.. Son varios, los que señalan que esta obra de Discépolo, tiene muchos puntos en común con Casa de Muñecas de Ibsen y creemos nos les falta razón para pensarlo.




La obra ambientada en el Buenos Aires del 30´, cuenta la historia de Amanda, una bella mujer, de infancia humilde, que pudo mejorar su posición económica y la de su familia, gracias a ser la "querida " de Don Camilo, un estanciero mucho mayor que ella. Era una unión por conveniencia, gracias a ella Amanda vivía una vida repleta de lujos, sin privaciones, pero no había pasión, ni amor verdadero en esa pareja, era una convivencia vacía de afecto,

Las cosas se complican, cuando Amanda conoce a Eduardo, un joven periodista de su misma edad, del que se enamora perdidamente. La atracción es mutua, Eduardo no puede resistirse al encanto de esa refinada y hermosa mujer. Pero la relación no era sencilla, ambos estaban comprometidos, ella con el estanciero y el periodista casado con la bella Elena, una mujer de sus casa, que lo quería con locura y nunca hubiera sospechado que su esposo podía serle infiel.

Que no eran libres era un problema, el otro y tal vez el mayor era que Eduardo era pobre, en realidad trabajaba, pero no le sobraba un peso. como para darle a Amanda,  la vida a la que estaba acostumbrada. Ella estaba dispuesta a renunciar a su vida actual, de lujos y derroche, para rehacer su vida, con un hombre al que verdaderamente amaba.




La tormenta se desata, por los de afuera, porque muchas veces dos personas pueden amarse, pero el entorno, les pueda jugar en contra en la relación. En el caso de Amanda, Doña Flora su madre, no estaba dispuesta a renunciar al buen pasar, que le permitía la relación de su hija con el estanciero. Ya habían tenido una infancia pobre y de ninguna manera quería aceptar, volver a aquella humilde realidad, habían subido de clase social y eso tenía un valor capital para ella. Y en el caso de Eduardo, no le sería tan sencillo, dejar a su mujer, que ingenua y cariñosa, seguía apostando firmemente a la relación con su amado esposo.

No contaremos más, mantendremos el suspenso, para que el espectador cuando vea la obra, descubra, si finalmente los deseos de Amanda de apostar por su amor, sin importarle el dinero, llegaran a buen puerto o si por el contrario, triunfarían,  finalmente las demandas de su familia, encabezadas por una madre muy interesada.

La puesta tiene una muy buena dinámica y mantiene en todo momento el interés del espectador, algo muy valorable, ya que la obra es generosa  en cuanto a su extensión, dura dos horas, cuando el teatro independiente por lo general ofrece piezas muco más cortas. Esta duración, permite una buena construcción de la historia y un muy buen recorrido a los personajes.





Hablando de ellos, es hora ya de destacar los excelentes trabajos actorales que presenta la obra. El proyecto fue iniciado por Marcelo Zitelli, que tomó la propuesta del grupo de actores del curso de Entrenamiento del Laboratorio de Teatro, la escuela que dirige junto a Lizardo Laphitz, Primero completó el elenco y luego de nueve meses de arduos ensayos, pudieron estrenar.

Realmente nos sorprendió, ver tan buenas actuaciones, de actores que en su gran mayoría están dando sus primeros pasos en la actuación, algo que no se notó para nada.
Son ocho los actores en escena y la buena factura de las interpretaciones, merece que hagamos mención de alguno de ellos.

Arranquemos por Laura Cañón, ella es Amanda, que cumple una gran actuación, estando realmente a la altura de las exigencias que presenta la pieza y su protagónico. Con su esbelta figura y una gran presencia escénica, demuestra haber sido una gran elección para el rol principal. Amanda con una determinación  y un carácter dominante, poco  común  en esos años, se vale de su belleza, para despertar las pasiones de varios hombres de la historia. Destacamos su gestualidad y los cambios de ánimo, que presenta en los diferentes estadios que presenta su personaje a lo largo de la trama, mostrando por momentos una personalidad arrolladora y en otros momentos siendo una mujer apasionada y sentimental. Una gran actuación la de Laura.




El otro gran protagonista es Fernando Arsenian, como Eduardo, el que despierta el amor de Amanda, con mucha pericia dá vida a un hombre que divide su amor entre dos mujeres, ya que indudablemente le cuesta abandonar a su abnegada esposa y debido a esto entra en un callejón del que le costará salir. Mucho aplomo y pasión, para representar su papel. Muy bueno su trabajo.

Es turno de nombrar a Mirtha Oliveri, ella es Doña Flora, la madre manipuladora de Amanda, pudiendo pecar de ser injustos, constituye para nosotros la mejor actuación de la noche. Con gran histrionismo, dá vida a un personaje enérgico e incansable, que con mucha astucia y una enjundia admirable, luchará sin tregua, por conservar su status social, sin importar lo que deba hacer para lograrlo. Una interpretación superlativa la de Mirtha, festejadísima por el público, por su gracia y su encanto.

Otra mujer que se destaca y mucho es Muriel Mahdjoubian, ella es Elena, la bella esposa de Eduardo, un atractiva y sufrida mujer, que resignó todo por su marido, hasta tener un hijo por no querer molestarlo. Nunca hubiera esperado ser traicionada. Con mucho sentimiento, compone un personaje sensible y que empatiza mucho con el público. Nos gustó mucho el trabajo de Muriel.





Roberto Scandizzo, es el señorial Don Camilo, un personaje con gran porte, elegante y muy querible, muy bien ambientado en esos años 30. Exquisita su actuación,

Ayelén Garaventta es la discreta y confidente ama de llaves, que tiene muchos momentos  de lucimiento, Martín Córdoba es el hermano menor de Amanda y Federico Shortrede es Leonardo, otro millonario interesado en Amanda, para conservar el suspenso, no contaremos más de su personaje.

Se hizo larga la descripción, pero la labor realizada por este grupo de actores merecía su reconocimiento, tanto por los trabajos individuales, como por el conjunto. Evidentemente hubo una buena elección del director del elenco y es acertada su conducción, ya que el elenco es numeroso y la obra además de ser extensa, tiene muchas exigencias.




La puesta tiene muchos puntos altos para destacar, arranquemos por la música en vivo de Martín Alfredo Martínez, que con su bandoneón, aporta muy bellos acordes tangueros, que ambientan en gran forma la obra. Muy destacable la bella realización escenográfica a cargo de Camila Tomietto, dividiendo el espacio escénico en tres, para representar diversos ambientes en forma simultánea, lo que le otorga mucha dinámica a la puesta. Excelente el vestuario de época de Celina Barbieri, aportando mucho glamour, con los vestidos largos de Amanda, los sombreros de Flora y los elegantes trajes de los hombres.
En definitiva, son muchos los recursos puestos al servicio de la pieza y todos juntos son una suma de detalles, que enriquecen mucho la puesta.






En definitiva, estamos en presencia de una muy buena propuesta, que nos sorprendió muy positivamente, una obra escrita hace más de 80 años, que tiene gran vigencia, que nos habla del amor, del dinero, de las relaciones por interés y como muchas veces, las mujeres son vistas como objetos de colección por muchos hombres adinerados.

Celebramos que se haya rescatado esta interesante obra de Discépolo, una historia fuerte que habla de amores prohibidos, de traiciones y de mandatos familiares, con la mujer como gran protagonista, en una puesta cuidada, con actuaciones que destacamos por su factura y compromiso.

Recomendamos Amanda y Eduardo, pieza para reflexionar y disfrutar, en un moderno y confortable teatro como El Tinglado, que una vez más presenta una propuest alto nivel artístico. El prolongado aplauso con que el público premia a los protagonistas al término de la función, es un claro indicador, de la hermosa noche teatral vivida.


Pensador Teatral.


martes, 7 de noviembre de 2017

El Mar de Noche

Viernes 23 hs y Domingos 18 hs en Apacheta Sala Estudio ( Pasco 623 )






Dramaturgia de Santiago Loza y Dirección de Guillermo Cacace.

Un texto emotivo y profundo el que nos presenta Santiago Loza, a esta altura, convertido en un verdadero especialista en escribir unipersonales ( este año disfrutamos de Todas las Canciones de Amor obra se su autoría y mágicamente interpretada por Marilu Marini ).

En esta oportunidad, para escribir El Mar de Noche, Santiago se inspiró en dos textos, De Profundis de Oscar Wilde y Muerte en Venecia de Thomas Mann, pavada de autores, logrando una pieza plena de sensibilidad y poesía.





Este gran texto llegó a manos de Guillermo Cacace, al que vimos lucirse en forma notable como director, en Mi Hijo Solo Camina un Poco más Lento, la obra croata, que lleva cuatro años en cartel, con un éxito increíble, llenando Apacheta que es su segunda casa, en las cuatro funciones semanales y transformando a esta pieza, en uno de los fenómenos del off de los últimos años.

En Mi Hijo Solo Camina ..., hay una superpoblación de actores en escena y el movimiento es una de las claves de la puesta. En este caso y en forma diametralmente opuesta, hay solo un protagonista en el escenario, ocupando un espacio muy pequeño del mismo y permaneciendo inmóvil gran parte de la obra, lo que significa un enorme reto.

Repasemos entonces, tenemos un texto muy rico, un director talentoso, restaba algo fundamental, encontrar al protagonista para encarar este gran desafío, de estar solito en el escenario, representando este monólogo profundamente dramático. Y el elegido, fue nada menos, que Luis Machín, un actor de enormes condiciones, que asume el desafío de afrontar su primer unipersonal, a esta altura de su carrera, donde ya encontró la madurez artisitica.





Encaró este trabajo, en forma particular y sin apuros, trabajando el proyecto por más año y medio, teniendo abierta la posibilidad de abandonarlo, si no les gustaba lo que iban viendo, algo que aquí aconteció, ya que se logró un gran producto final.

Digamos brevemente de que trata la pieza, en la misma vemos a un hombre profundamente abatido, sentando en un sillón en la habitación de un hotel de una ciudad balnearia que no se nombra. Se lo nota desolado, ha sido abandonado por su amante, un bello joven, varios años menor que el.

El hombre ha sufrido un desengaño amoroso, que lo golpeó sin piedad, lo derrumbó por completo, vemos los despojos de este hombre, que se siente vencido, sin ganas, ni fuerzas. Sabe que en el amor se gana y se pierde y el perdió. No hay esperanzas, ni futuro en el horizonte, nada puede mitigar ese inmenso dolor que se siente y que lo está consumiendo lentamente.

Está solo y paralizado, sus palabras evocan ese amor que fue algo pletórico y que ya no volverá. El desánimo y la desolación invaden el ambiente, mientras de fondo oye el ruido lejano de ese mar en la oscuridad de la noche.




Digamos ya que la actuación de Luis Machin es extraordinaria, su manejo escénico es brillante, se nota que disfruta enormemente su interpretación, manejando los tiempos de manera perfecta, es un placer ver la forma en que entona cada palabra, sus silencios, la mirada vacía, ese dolor contenido y los mínimos movimientos que logra realizar con gran esfuerzo, ya que el dolor, sin dudas parece paralizarlo literalmente.

Un trabajo admirable el de Luis, al que vimos lucirse en infinidad de papeles, pero aquí en un papel totalmente diferente, está solo en el escenario,  ejerciendo todo su poder como actor y pudiendo mostrar todo su bagaje técnico, en una actuación soberbia, que conmueve.

La escenografía es despojada, solo un sillón, una copa de agua, un sombrero y un par de zapatos, el vacío y la oscuridad, invade el escenario, potenciando la soledad que siente aquel hombre. La luz tenue y la música de fondo, acompañan esa atmósfera melancólica, que requiere el libro.
Una puesta austera en recursos la que plantea el director, que causa muy buen efecto, ya que realza la interpretación de ese hombre, que está absolutamente solo en escena y en el mundo.

En definitiva, estamos en presencia de una pieza de una enorme sensibilidad, una obra que nos habla del desamor, de como un desengaño amoroso, puede llevarnos a un estado de dolor y abatimiento, que nos hace tocar fondo y que nos quita todas las ganas de seguir adelante.





El Mar de Noche, es una pieza intensa, dolorosa, que nos muestra un hombre sin fuerzas, que susurras sus últimas palabras y apila sus recuerdos, a sabiendas que le queda poco camino por recorrer.

Una obra excelente, en la que confluyen un texto inteligente, un director que tiene las ideas muy claras y  un intérprete de lujo, como el enrome Luis Machín, que nos brinda una clase magistral de teatro.

El silencio absoluto con el que el público sigue el desarrollo de la pieza, denota la admiración y la compasión que siente el público, por ese actor que domina la escena con un oficio admirable, quedando grabado en nuestras retinas,  ese final con los espectadores de pie, ofreciendo una ovación y un aplauso emocionado y prolongado, siendo este un un merecido reconocimiento por la gran velada de teatro vivida.


Pensador Teatral.